“Padre
de los jóvenes”
Buenos
días, amigo/a
Hoy recordamos a san Juan Bosco. A los dos años quedó huérfano de padre,
pero se constituyó en padre de numerosos huérfanos. Y millares de jóvenes de
toda raza y nación, lo aclaman como “Padre
y maestro de la juventud”.
Nació en un hogar
pobre. Su vida transcurrió en la pobreza, aunque por sus manos pasaron millones
para beneficio de los necesitados. Dedicó sus mejores energías a la juventud
indigente y desamparada. Murió pobremente a los 72 años. El 80% de los
salesianos trabajan ahora en países pobres. Revitalizó el “sistema preventivo”
para la educación cristiana de niños y jóvenes, basado en la doctrina
evangélica asimilada por su vigorosa y original personalidad. Cimentó su método
educativo en la razón, la religión y el amor. Entre los frutos de su obra de
educador se destaca el adolescente Santo Domingo Savio. Don Bosco figura entre
los grandes educadores de la humanidad.
El Papa Juan Pablo II dijo: “Don Bosco es un destacado ejemplo de amor
de predilección por los jóvenes, en especial por los más necesitados. Su figura
sigue atrayendo con su hechizo a la juventud de las culturas más diferentes de
todos los lugares de la Tierra”.
Te dejo un pensamiento que Don Bosco solía repetir: “Las
espinas de la vida se trocarán en flores para toda la eternidad”. P. Natalio.