sábado, 31 de julio de 2010


El hombre de paz


Buenos días, amigo/a

A la obra gigantesca de la paz mundial, tú puedes aportar tu sonrisa, la paz de tu propio corazón, porque quien está en paz consigo mismo, la irradia a su alrededor, a la familia, al círculo de amigos, al entorno de su trabajo cotidiano. Además trata de evitar toda intolerancia y discriminación. Ahí tienes un programa, simple y fácil, para ser un constructor eficaz de la paz.

El hombre de paz sabe mirar a todos con respeto y benevolencia. No condena a ninguna persona, a ningún grupo, a ninguna institución, a ningún pueblo. Perdona las injurias presentes y pasadas, se libra de las garras del odio, guarda la libertad de su corazón para amar; para convivir; para comenzar una vida nueva cada día. Desea sinceramente la paz con todos, la colaboración, la convivencia, el gozo de la fraternidad y del servicio. Trata de simplificar los problemas en vez de agrandarlos; no acumula las sombras, en todo busca resquicios de luz y caminos de esperanza.

En los momentos críticos aprende a conservar la calma, de modo que tus decisiones sean justas y sabias. En lugar de exasperarte y dejarte dominar por la ira, cállate porque el silencio aquieta. Respira profundamente y ora. El Señor te bendiga con su paz. P. Natalio.

viernes, 30 de julio de 2010


Pensar en los demás


Buenos días, amigo/a

Existe una inmensa alegría en poder alegrar a otros a pesar de nuestra propia situación. La aflicción compartida disminuye la tristeza, pero cuando la alegría es compartida, se duplica. Si deseas sentirte feliz y realizado, basta compartir tus bendiciones, especialmente ésas que no se pueden comprar con dinero.

Un niño, tiritando de frío y con carita de hambre, vino a recoger un pullóver que le ofrecí cuando lo encontré en la calle. Quedaba algo de comida del almuerzo, y le pregunté: —¿Quieres almorzar? Él respondió: —Sí, quiero, señora. Y comió de prisa, con muchas ganas. En la mitad del plato, de repente, se detuvo y dijo: —Señora, ¿me regala un pedazo de papel? Al traerle el papel, envolvió con cuidado el resto de su comida, y explicó: —Es para mi amigo. Hoy a esta hora, él no ha comido nada todavía. Quedé asombrada. ¡Y yo pensaba que estaba siendo caritativa porque le di un suéter viejo y un poco de comida que sobró!

jueves, 29 de julio de 2010

29 de julio 2010


Dando es como recibimos


Buenos días, amigo/a

El egoísmo atrofia al hombre, que sólo en la donación generosa a los demás.encuentra su madurez y plenitud. Si te preocupas demasiado por ti mismo y tu propio entorno, si vives para acumular dinero y comodidades, no te quedará tiempo para los demás. Si no vives para los demás, la vida carecerá de sentido para ti, porque la vida sin amor no vale nada.

El científico Luis Pasteur anduvo siempre escaso de dinero para sostener su Instituto de Investigación. Un día, acudió a la señora Bondicant, dueña de una gran cadena de almacenes, para pedirle su apoyo. La señora recibió al investigador y éste le expuso el motivo de su visita. Al final, la dueña de la empresa le dijo: —Ya he aportado mi ayuda a tanta gente que pide. Usted perdone, de todos modos le daré algo para su obra. La señora salió y regresó con un cheque firmado. Pasteur lo miró antes de dar las gracias, y quedó asombrado. El cheque era por un millón de francos. La señora se adelantó y le dijo: —¡Gracias, profesor, por acordarse de mí! ¡Gracias por darme la oportunidad de compartir!

Cada día puedes ser generoso en acciones pequeñas. Este propósito abre el corazón poco a poco, y descubres admirado que nunca pierdes. Por el contrario te fortaleces y puedes superar el temor de ser vulnerable. Practicar la generosidad ejercita al corazón: cuanto más se da, más se fortalece. Recuerda que Jesús dijo: “Hay más alegría en dar que en recibir”. P. Natalio.

miércoles, 28 de julio de 2010

28 de julio 2010


Cada cosa a su tiempo


Buenos días, amigo/a.

En todo es necesario proceder con discreción y mesura. La Biblia dice que hay un tiempo oportuno para cada cosa: un tiempo para callar y un tiempo para hablar, un tiempo para trabajar y un tiempo para descansar, etc. Jesús también lo tuvo en cuenta. Después de unos días de muy intensa predicación, llevó a sus discípulos a un lugar solitario para reposar un poco.

En cierta ocasión un cazador de bestias feroces, yendo por el desierto, vio al abad san Antonio que bromeaba con los hermanos y se escandalizó de ello. Pero el anciano, queriendo hacerle comprender que conviene ser condescendiente en alguna ocasión con los hermanos, le dice:
—Pon una flecha en tu arco y ténsalo. Y lo hizo. Le dice: —Ténsalo más. Y lo hizo. Le dijo una vez más: —Ténsalo. El cazador le dijo: —Si lo tenso más se va a romper. Le dijo el anciano:
—Así sucede también con las obras de Dios: si con los hermanos tensamos el arco de manera excesiva, enseguida se rompen. Por eso es necesario ser condescendiente en ocasiones. Al oír esto, el cazador se sintió presa de arrepentimiento y se marchó muy edificado con ello.

Lo que hizo san Antonio con sus monjes, tú lo tienes que hacer contigo mismo. Sé prudente en armonizar el trabajo con el descanso, la vida de estudio y reflexión con la vida social, el cuidado del cuerpo y el del espíritu. Los autores clásicos tenían un proverbio muy sabio: “Nada en exceso”. Que sepas organizar tu día con sabiduría y prudencia. P. Natalio.

martes, 27 de julio de 2010

27 de julio 2010


El misterio de la vida


Buenos días, amigo/a

Hay una oración muy buena para recordar cuando nos sucedan esas cosas desagradables que no tienen más solución: “Señor, concédeme fortaleza para solucionar lo que tiene solución; pero, valor para aceptar lo que ya no tiene solución; y sabiduría para reconocer la diferencia”. Es una sabia lección que se resume así: “Aceptar, olvidar, y seguir adelante”.

Padre mío, dueño de la vida y de la muerte. Dame la gracia de aceptar con paz el misterio doloroso de la vida, las enfermedades, la decadencia y la muerte; aceptarlas sin lamentos, sin lágrimas, en silencio y paz. Me acuerdo de que tu Hijo transformó lo más negativo e inútil del mundo, como es el dolor y la muerte, en fuente de redención y vida eterna. Yo también quiero que desde hoy mi dolor y mi muerte sean fuente fecunda de redención. A partir de este momento quiero sufrir con Jesús y como Jesús. En tus manos, Padre mío, me abandono con mi vida y mi muerte, mi salud y mi enfermedad. Amén. Ignacio Larrañaga.

Quien vive abandonado en el Señor crece en una relación verdaderamente filial con Dios, su Padre; está disponible a todo lo que se presente, su corazón se vuelve simple y libre, tiene facilidad para vivir con humildad de corazón los misterios de la vida, se libera de toda ansiedad por el porvenir incierto: “Será lo que el Padre quiera”, dice con total sumisión. P. Natalio.

lunes, 26 de julio de 2010

26 de julio 2010


¿Cómo me llamaba?


Buenos días, amigo/a

Toda persona es importante, y merece tu respeto y el mío. Alguien escribió que el sonido más dulce y querido para cualquiera de nosotros es el propio nombre y apellido. Ahí tienes un camino para llegar al corazón de los demás. Pon atención en recordar los nombres. Es cuestión de ejercicio y de interés humano.

Dios estaba creando el mundo y ponía nombre a cada animal. —Tú te llamarás gallina. Tú te llamarás caballo. Tú te llamarás burro. Y así continuó con los demás. Se acercó el burro y preguntó: —¿Cómo me llamaba yo? Y Dios le contestó: —Burro. Después de tres minutos, el burro volvió a preguntar: —¿Cómo me llamaba yo? —Burro. Y así cinco veces más le preguntó: —¿Cómo me llamaba yo? Entonces Dios le respondió: —Burro idiota. Y el burro dijo: —Yo ya me estaba aprendiendo el nombre y usted ahora me dice el apellido.

Había un señor que en las fiestas recibía a los invitados y les preguntaba su nombre. Al final del banquete repetía nombre y apellido de los cien o más invitados. Un aplauso interminable ovacionaba a este prodigio de retentiva, Harry Lorrayne, autor de “Cómo desarrollar una supermemoria”. Algo puedes hacer para mejorar tu memoria. Vale la pena intentarlo. P. Natalio.

domingo, 25 de julio de 2010

25 de julio 2010


Confiar en Dios


Buenos días, amigo/a

Confiar en Dios que nos ama, es fundamental para aceptar, con ánimo sereno, los contra-tiempos y dificultades de cada día. Nunca tendrás pruebas superiores a tus fuerzas. El Señor correrá a darte una mano cuando te parezca hundirte. Basta que lo invoques con fe y todo redundará para tu mayor bien. Aquí tienes una oración para interiorizar este sentimiento.

- Para mí lo bueno es estar junto a Dios.
- Para mí lo bueno es estar junto a Dios.

- Hacer del Señor mi refugio.
- Estar junto a Dios.

- Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
- Para mí lo bueno es estar junto a Dios. Salmo 72.

En los salmos varias veces se declara feliz al hombre que busca refugio en Dios cuando llegan las tribulaciones y angustias de la vida: “Dichoso el hombre que confía en Dios, porque no quedará defraudado”. Los hombres fallan y desilusionan, Dios no. Que él te conceda coraje y gracia para abandonarte en sus brazos paternales. P. Natalio.

sábado, 24 de julio de 2010

24 de julio 2010


El perro y la liebre


Buenos días, amigo/a

Tener buenas razones para actuar es una gran sabiduría. Es la base de la constancia. Dan una sensación de seguridad y serenidad. Despiertan y encauzan las mejores energías. Ayudan a actuar con plena conciencia y conocimiento. Mantienen claros los objetivos. Son valiosas en las crisis y posibles desánimos. Estos motivos nos dinamizan para la acción.

Un perro perseguía afanosamente a una liebre, pero al cabo de una larga carrera, se dio por vencido. Un pastor que lo vio detenerse, se burlaba de él diciéndole: —Esa pequeñita es la mejor corredora de los dos. Pero el perro le respondió: —Es porque tú no adviertes la diferencia entre nosotros. Yo sólo corría por un bocado para la cena, pero ella corría para salvar su propia vida. (Esopo).

El que sabe motivarse a sí mismo, sabrá cómo motivar a los demás: si es padre o madre a sus hijos, si es maestro o profesor a sus alumnos, si es jefe de personal a sus dependientes, etc. Se trata de que tengas presente las ventajas que te aporta realizar esta o aquella tarea, para poner en ella entusiasmo, convencimiento, entrega. Esta reflexión es de suma importancia. P. Natalio.

viernes, 23 de julio de 2010

23 de julio 2010


El don de la vida


Buenos días, amigo/a

La vida es un regalo del amor sin límites que Dios nos tiene. Que sepas agradecerle este magnífico don. Pídele también cuanto necesitas para que tu vida esté inundada de paz, amor y fuerza para hacer fructificar los talentos recibidos. Aquí tienes un mensaje de la Reina de la Paz, donde encontrarás relacionados el don de la fe y de la vida con la oración.

“¡Queridos hijos! También hoy los invito: oren, oren, oren hasta que la oración se convierta en vida para ustedes. Hijitos, en este tiempo de manera especial oro ante Dios para que les dé el don de la fe. Sólo en la fe descubrirán el gozo del don de la vida, que Dios les ha dado. El corazón de cada uno sentirá gozo al pensar en la eternidad. Yo estoy con ustedes y los amo con tierno amor. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado! ”

¿Has encontrado el sentido de tu vida? ¿Tienes un motivo para levantarte cada mañana con ilusión y alegría? La Madre Teresa de Calcuta decía con frecuencia: “Si no se vive para los demás, la vida carece de sentido”. Es hermoso observar que hay personas que ofrecen con desinterés y generosidad su vida a los demás. P. Natalio.

jueves, 22 de julio de 2010

22 de julio 2010


Demasiado tarde


Buenos días, amigo/a

En el evangelio leemos que Jesús dijo: “Busquen primero el reino de Dios y su justicia, y lo demás se les dará por añadidura”. El error del hombre consiste en buscar con afán en primer lugar las cosas de la tierra, los intereses propios, mientras le dan a Dios las migajas de su tiempo, de su dedicación, de su amor. Los ídolos han suplantado a Dios en su corazón.

En un avisador parroquial observé varios carteles. En el primero había un bebé gordito y debajo se leía: "Demasiado pequeño para amar a Dios". El segundo presentaba a una pareja de recién casados besándose. Un letrero explicaba: "Demasiado felices para amar a Dios". Le seguía un ejecutivo rodeado de teléfonos y dando órdenes: "Demasiado ocupado para amar a Dios". A continuación un hombre rico, con relucientes anillos de oro y pedrería, un cigarro en la boca, al bajar de su lujoso coche: "Demasiado seguro de sí mismo para amar a Dios". Y finalizaba la serie con un ataúd: "Demasiado tarde para amar a Dios”. “Si escuchas hoy la voz del Señor, no endurezcas tu corazón”, (Sal. 95).

Para amar a Dios basta meditar en su amor por ti, con la Biblia en la mano Te sugiero que leas lentamente, el salmo 23 del Buen Pastor, diciendo “Gracias, Señor”, a cada frase del mismo. Sentirás conmoverse tu corazón por el amor delicado y tierno de Dios que te proporciona seguridad, descanso, renovación, defensa, alimento e indefectible amor. P. Natalio.

miércoles, 21 de julio de 2010

¡No te rindas!


Buenos días, amigo/a

El eminente compositor Beethoven dijo una vez que el genio se compone del dos por ciento de inspiración y del noventa y ocho por ciento de perseverante trabajo. “La constancia es el alto precio que hay que pagar por todas las conquistas de este mundo. Todo lo más grande en cualquier ámbito se ha conseguido por una ardiente perseverancia”, (I. Larrañaga).

¡No te rindas! Aunque te sientas triste, piensa en un mañana pleno de alegría y de sueños realizados. Entonces comprenderás que también los errores son indispensables para aprender. ¡No te rindas! Aunque te sientas solo, piensa en todas las personas que te brindaron afecto durante tu vida. También en adelante amarás y serás amado. ¡No te rindas! Aunque te sientas derrotado, piensa siempre en la victoria luminosa al final de tu camino, y descubrirás que las caídas te muestran el poder de tu fe y de tu fuerza. ¡No te rindas! Aunque te sientas perdido, aferra la esperanza que anida en tu corazón, y sal a recorrer el sendero soñado, con la mirada puesta en el cielo. ¡No te rindas! ¡Dios camina contigo!

Dios siempre está dispuesto a concederte sus dones, pero pide tu colaboración, tu esfuerzo, tu voluntad. Leonardo da Vinci dispuso que en su tumba se escribiera este epitafio: “Tú, Señor, regalas todos tus dones al precio del esfuerzo”. El éxito comienza siempre con una voluntad decidida a permanecer firme en la lucha, ése es el gran regalo de Dios. Utilízalo con humildad. P. Natalio.

martes, 20 de julio de 2010

20 de julio 2010


Como a un padre


Buenos días, amigo/a

La oración que haces al comenzar la jornada y al terminarla, es la expresión de tu amor y confianza en Dios. Entre estos dos momentos, si amas de verdad a Dios con toda el alma y con todas las fuerzas, como dice la Palabra, de alguna manera el recuerdo y la presencia del Señor te acompañarán en las variadas tareas de tu jornada.

El abuelo preguntó al nietecito si rezaba las oraciones de la noche. —¡Oh, sí!, respondió el niño. —¿Rezas también por las mañanas?, siguió preguntando el abuelo. —¿Para qué?, contestó el niño, en el día no tengo miedo. Así obramos muchos de nosotros: recurrimos a Dios, como se recurre al médico, cuando lo necesitamos. Entonces lo invocamos diciéndole: "Padre nuestro". Ya que le damos ese nombre, deberíamos acudir a él no sólo cuando lo necesitamos, sino también para manifestarle, como Padre que es, nuestras alegrías, nuestra gratitud, nuestras penas, nuestras preocupaciones, nuestros deseos.

“Uno puede orar en las calles, las oficinas, las escuelas, como así también en el recogimiento de la propia habitación o en medio de multitudes. Pero de poco sirve orar por la mañana, si se vive el resto del día como un ateo. La verdadera oración moldea la vida y una vida auténtica exige la oración”, (A. Carrel). Que la oración cada vez gane más espacio en tus jornadas. P. Natalio.

lunes, 19 de julio de 2010

19 de julio 2010


¿Usas todas tus fuerzas?


Buenos días, amigo/a

“¿Por qué te confundes y te agitas ante los problemas de la vida? Déjame el cuidado de todas tus cosas y todo te irá mejor. Cuando te abandones en mí, todo se resolverá con tranquilidad según mis designios. Reposa en mí y deja en mis manos tu futuro. Dime frecuentemente: «Jesús, yo confío en ti». Déjate llevar en mis brazos divinos, no tengas miedo. Yo te amo”.

Se cuenta la historia de un niño pequeño, que hacía un gran esfuerzo por levantar un objeto en extremo pesado. Su papá, al entrar en el cuarto, vio la dificultad en que estaba su hijo, y le preguntó: —¿Estás usando todas tus fuerzas? —¡Claro que sí! –contestó impaciente el niño.
—No, –le respondió su padre– no me has pedido que te ayude.

Es imposible que nosotros mismos encontremos solución a todos nuestros problemas, nuestras angustias, nuestras dudas, nuestras tristezas; por lo tanto, entreguemos nuestras cargas a Cristo, que es la mejor solución para encontrar alivio en todo lo que nos pesa y aflige en la vida. P. Natalio.

domingo, 18 de julio de 2010

18 de julio 2010


Fortaleza en la lucha


Buenos días, amigo/a

Sufrir tentaciones o pruebas es una situación normal del hombre. Surgen de nuestra naturaleza inclinada al mal, o también del enemigo de Dios o de ese mundo que vive al margen de la ley divina. La tentación es una incitación a pecar. También los santos pasaron por tentaciones. Pero lucharon y triunfaron.

Abba Poimén contaba que el famoso ermitaño Juan Colobos había rogado a Dios que le quitara sus pasiones y lo convirtiera en un ser libre de toda inquietud. Y le fue concedido. Pero, después de un tiempo fue a ver a un Anciano para decirle: —Yo me veo descansando, sin tener ningún combate. Y el Anciano le aconsejó: —Ve y suplica a Dios para combatir nuevamente con la misma aflicción y la misma humildad que tenías antes, ya que es a través de los combates como progresa el alma. Entonces suplicó a Dios y, cuando se produjo el combate, ya no rogó para que lo eximiera de la lucha, sino que le rogó: —Señor, dame fortaleza en los combates.

Las tentaciones te ofrecen una ocasión favorable para vivir la fe en el Señor, acrecentar la humildad y expresarle tu gratitud. Son oportunidad de crecimiento. Aprovéchalas, pero no las busques. “Quien busca el peligro, en él perecerá”. Sé valiente y ten ánimo, con el Señor triunfarás. P. Natalio.

sábado, 17 de julio de 2010

17 de julio 2010


Sé amigo de ti mismo


Buenos días, amigo/a

Siempre tenemos que recordar esto: lo esencial es invisible. Y como vivimos mirando la superficie, no sabemos nada de lo esencial. Por eso resistimos y protestamos como los ignorantes. Hay realidades en la vida que ya nadie puede alterar. La sabiduría consiste en aceptarlas, dejar de resistir vanamente, abandonarte con fe en manos del Padre, que te ama.

Padre mío, fuente de mi vida. Dame la gracia de hacerme amigo de mí mismo. Si alguna vez sentí vergüenza de ser como soy, te pido perdón a ti, autor de mi vida y mi ser. Perdona mi insensatez y mi ingratitud. Desde ahora quiero sentirme contento de ser como soy, feliz de ser como soy. Te alabo, te admiro y te agradezco por estas manos, este rostro, esta figura general. Bendito seas por haberme hecho tal como me hiciste. En tus manos me entrego, feliz de ser como soy. Ignacio Larrañaga.

“Sólo sé una cosa: que Dios sabe todo y nosotros no sabemos nada. Sé también que me quiere mucho y que, lo que él permite es lo mejor para mí. Cierro, pues, la boca y acepto, en silencio y paz, todos y cada uno de los acontecimientos que, en su día, me hicieron sufrir tanto. Hágase tu voluntad, Padre mío, yo me abandono en ti”, (Larrañaga). Que esta reflexión proyecte claridad en tu vida. P. Natalio.

viernes, 16 de julio de 2010

16 de Julio de 2010

¡Cómo prejuzgamos!


Buenos días, amigo/a

Cuántas veces nos equivocamos al juzgar a los demás. No conocemos la realidad de las personas, con todas las circunstancias de su vida; y sin embargo las condenamos en nuestro interior porque quizás a primera vista nos han caído mal por un detalle sin importancia. Por prudencia no te dejes llevar de reacciones instintivas. P. Natalio.

El doctor está examinando a un paciente y le dice:
Usted debería haber venido a verme antes.
Sí... bueno, en realidad fui a ver a un curandero.
¿Cómo? ¿Y qué estupidez le dijo ese curandero?
Que viniese a verlo a usted…  

Jesús dijo “No juzguen y no serán juzgados”, y también “Felices los misericordiosos porque obtendrán misericordia”. El que critica es porque antes ha juzgado al prójimo. No juzgues porque no conoces la situación real de cada uno. Eso sólo lo sabe Dios. Júzgate en cambio a ti mismo: es lo más acertado, es el tiempo mejor empleado. P. Natalio.

jueves, 15 de julio de 2010

15 de julio 2010

Son espíritu y vida


Buenos días, amigo/a

Dios está vivo en su Palabra para iluminarte, consolarte, fortalecerte… Pero debes acercarte a ella con verdadera fe. Antes de leerla es adecuado que te pongas en la presencia del Señor con alguna oración que te transporte a un clima de devoción y acogida cordial del don de Dios. Aquí tienes una oración para interiorizar el valor de esta Palabra que genera vida nueva.

- Tus palabras, Señor, son espíritu y vida.
- Tus palabras, Señor, son espíritu y vida.

- Tú tienes palabras de vida eterna.
- Son espíritu y vida.

- Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
- Tus palabras, Señor, son espíritu y vida.

El profeta Jeremías veneraba la Palabra de Dios. Sentía consumirse su corazón hasta encontrar un fragmento cualquiera de ese divino manjar para saciar el hambre que atormentaba su espíritu. Hablando con Dios una vez le dijo: “Cuando encontraba palabras tuyas, las devoraba; ellas eran mi gozo y la alegría de mi corazón”. Esa sea tu actitud. P. Natalio.

miércoles, 14 de julio de 2010

14 de julio 2010


El jabalí la zorra


Buenos días, amigo/a

Los años juveniles son para adquirir buenos hábitos. La única diferencia entre el adulto fracasado y el que ha tenido éxito está en la diferencia de sus hábitos. Los buenos hábitos son la clave de todo éxito. Por lo tanto capitaliza las auténticas riquezas que, como todo lo esencial, “son invisibles a los ojos”; y persevera en el esfuerzo, aun si no ves resultados inmediatos.

Un jabalí estaba de pie bajo un árbol frotando sus colmillos contra el tronco. Una zorra que pasaba por allí le preguntó por qué él afilaba sus dientes cuando no se veía ningún peligro inminente de cazadores con sus perros. Él le contestó: —Lo hago con toda intención; ya que así nunca tendré que afilar mis armas justo en el momento que es urgente usarlas. (Esopo).

El futuro es un desafío a prepararte para los problemas que la vida te presente. Empieza afrontando los desafíos de cada día como una invaluable oportunidad para desarrollar las habilidades necesarias y así esperar tranquilo las pruebas que vendrán. Un proverbio chino dice: “Excava el pozo antes de que tengas sed”. Sabio y prudente consejo. P. Natalio.

martes, 13 de julio de 2010

13 de julio 2010


Valor de los sacrificios


Buenos días, amigo/a

El mensaje de la Reina de la Paz nos conecta hoy con Jesús que no buscó su propia complacencia, sino agradar siempre a su Padre. Te pide unir a la oración, renuncias y sacrificios para fortalecerte contra las seducciones del mal y de su instigador.

¡Queridos hijos! También hoy los invito a llenar cada día con breves y ardientes oraciones. Cuando oran, su corazón está abierto y Dios los ama con un amor especial y les da gracias especiales. Por eso, utilicen este tiempo de gracia y conságrenlo a Dios como nunca antes hasta ahora. Hagan novenas de ayuno y de renuncia para que Satanás esté lejos de ustedes, y la gracia permanezca alrededor de ustedes. Yo estoy cerca de ustedes e intercedo ante Dios por cada uno de ustedes. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado! ”

Sufrir una ligera palabra, reprimir un leve resentimiento, condescender con la voluntad del prójimo, excusar una indiscreción, mortificar un pequeño deseo, he aquí un elenco de actos virtuosos al alcance de todo el mundo y que se nos presentan a cada paso, (A. Milagro). Que estos ejemplos te iluminen para seguir un valioso camino de dominio de ti mismo. P. Natalio.

lunes, 12 de julio de 2010

12 de julio 2010


El barco en peligro


Buenos días, amigo/a

Confiar en Dios, es depositar toda nuestra fe en él. Dejarle el cuidado de tus cosas. Permitirle disponer de tu futuro, porque sabes que te ama más que tú mismo. Reposar en él “como un niño en brazos de su madre” (Salmo 131). Y confiar sobre todo en las pruebas, cuando las cosas resultan duras e incomprensibles.

En cierta ocasión se desató una tempestad en alta mar. Parecía que la nave iba a naufragar. Toda la tripulación y los pasajeros aterrorizados corrían de un lugar a otro sin saber qué hacer. Mientras tanto, en uno de los camarotes dormía un niño de siete años, hijo del capitán. Uno de los tripulantes lo fue a despertar inmediatamente. Cuando el chico se dio cuenta de lo que sucedía, preguntó: ¿y en manos de quién está ahora el timón? El barco está en manos de tu padre, respondió el marinero. Entonces, no tengo por qué preocuparme, el sabe bien qué hacer, dijo confiadamente el niño y siguió durmiendo.

“Descarguen en el Señor sus inquietudes, ya que él se ocupa de ustedes”. Si lees y meditas la Biblia, encontrarás esta exhortación y otras semejantes. Te ayudarán a fortalecer tu confianza en Dios que te ofrece refugio “a la sombra de sus alas mientras vienen calamidades” de cualquier clase y magnitud. “No temas, contigo estoy. Yo te amo”, te asegura Dios. P. Natalio.

domingo, 11 de julio de 2010

11 de julio 2010

Si yo cambiara…


Buenos días, amigo/a

Crecer es dejar atrás algo a lo cual estuvimos apegados y de lo cual nos cuesta desprendernos; es atrevernos una vez más y estar dispuestos a ser diferentes de lo que fuimos ayer; es desarrollarnos y evolucionar desde adentro. Cuando decidimos cambiar una actitud negativa, estamos creciendo. Cuando decidimos corregir un error, estamos evolucionando.

Si yo cambiara mi manera de pensar hacia otros, me sentiría más sereno. Si yo cambiara mi manera de actuar ante los demás, los haría felices. Si yo aceptara a todos como son, sufriría menos. Si yo me aceptara tal cual soy, quitándome mis defectos, ¡cuánto mejoraría mi hogar y todo mi medio ambiente! Si yo criticara menos y amara más, si yo cambiara... ¡cambiaría el mundo!

Resultado de los cambios positivos es la madurez. Serás maduro cuando tengas la habilidad de controlar la ira y resolver las discrepancias sin violencia o destrucción. Otro signo de madurez es la voluntad de posponer el placer inmediato en favor de un beneficio a largo plazo. Acepta el desafío de cambiar un poco cada día y crecer en valores, sin pausa y sin prisa. P. Natalio.

sábado, 10 de julio de 2010

10 de julio 2010


Entre truenos y relámpagos


Buenos días, amigo/a

Un niño es el regalo de Dios para tus días tristes. Es el movimiento y el torbellino de la vida que se agita, que salta, que corre, que sueña, que sonríe y se duerme. Un niño es siempre una esperanza, un por qué vivimos y trabajamos sin dar lugar a la fatiga. Un niño es un misterio impenetrable; ¿qué será de él en el futuro?

Una nena, como todos los días fue caminando a la escuela, a pesar del mal tiempo y de las nubes oscuras. A los pocos minutos el viento arreció y empezaron los rayos y los truenos. La madre pensó que su hijita podría tener miedo en el camino, pues ella misma estaba asustada por la tormenta. Preocupada, la madre entró a su auto, y se dirigió a la escuela. En el camino encontró a su hija caminando, y notó que a cada relámpago la niña se detenía, miraba hacia arriba y sonreía. Cuando la niña subió al auto, la madre le preguntó muy curiosa: —¿Qué estabas haciendo? La niña le respondió: —Estaba sonriendo, porque Dios no paraba de sacarme fotos.

Un niño es el interrogante permanente sobre el mundo que hemos construido, sobre los valores que nos movilizan, sobre el destino de nuestra humanidad... ¿Saldría el sol cada mañana si ellos no iluminaran nuestras noches? ¿Podríamos vivir sin su bullicio, sin sus sonrisas, sin la abismante profundidad de sus preguntas? (Anónimo). Agradezcamos este don del Cielo. P. Natalio.

viernes, 9 de julio de 2010

Buenos días, 9 de julio 2010

Camino diario de felicidad


Buenos días, amigo/a

Hoy te ofrezco una notable síntesis de vida serena y feliz. Son siete valores que merecen tu atención para interiorizarlos y practicarlos habitualmente. Su conjunto te dará una personalidad armónica y agradable.

Orar: es el poder más grande sobre la Tierra.
Amar: es el privilegio que Dios nos ha dado.
Leer: es la fuente de la sabiduría.
Amistad: es el camino de la felicidad.
Dar: es la forma de recibir.
Saber descansar: es el secreto de la eterna juventud.
Reír: es la música del alma.

La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días”, (B. Franklin). “Cuando dejamos a un lado nuestra dicha y nos concentramos en hacer dichosos a los demás, mágicamente nos envuelve también a nosotros la felicidad. (J.Benavente). Que seas feliz. P. Natalio.

miércoles, 7 de julio de 2010

Buenos días, 8 de julio 2010

Niño paralítico

Buenos días, amigo/a

La gente sencilla intuye que los hombres de Dios tienen acceso al divino poder y le arrancan milagros. Son hombres de oración y viven el amor cristiano a la perfección. Por eso los santos se vieron rodeados de gente apremiada por situaciones dolorosas que les pedían intercesión ante Dios para remediar sus males. Así le pasó una vez a un santo monje del desierto.

Un hombre, en Egipto, tenía un hijo paralítico. Con el niño en los brazos partió al desierto hasta la celda del santo abad Macario. Lo abandonó junto a la puerta y se fue. El niño asustado empezó a llorar. Cuando el anciano monje salió, encontró al niño e inclinándose hacia él, le preguntó: —¿Quién te trajo hasta aquí? El pequeño respondió: —Mi padre, él me arrojó aquí y se fue. Macario le dijo entonces: —Levántate y ve a buscarlo. Curado allí mismo, el niño se puso de pie, buscó a su padre y regresaron juntos a su casa.

El padre del niño había llevado con sacrificio a través del desierto a su hijo maltrecho. Con un gesto bien significativo lo dejó a la entrada de la celda del santo, como diciéndole: “Si no lo curas, hazte cargo tú de cuidarlo, mantenerlo, ya no puedo más”. Esta dura situación del padre fue captada al instante por el abad. Y se produjo el milagro para gloria de Dios. P. Natalio.