viernes, 31 de julio de 2015


Lo importante en la vida


Buenos días, amigo/a

Los infortunios y reveses traen siempre algún valioso mensaje que debes aprovechar con sabiduría. “Son bendiciones de Dios que entran en casa rompiendo los cristales”, como escribió un pensador cristiano. Pero hay que reflexionar con calma para atesorar la experiencia que dejan, porque las desgracias descubren al alma luces que en la prosperidad no llegas a percibir.

Es imposible cruzar la vida sin que un trabajo salga mal hecho, sin que una amistad cause decepción, sin padecer algún quebranto de salud, sin que un amor nos abandone, sin que ningún ser querido fallezca, sin equivocarse en algún negocio. Ése es el costo de vivir. Sin embargo, lo importante no es lo que suceda, sino cómo sobrellevarlo. Si te pones a coleccionar heridas eternamente, vivirás como un pájaro herido incapaz de volver a volar.

Hay un refrán que dice: “Con las piedras que me arrojen, construiré mi casa”. La capacidad de transformar un menos en más, es propia del hombre que no se deja frenar por los obstáculos, sino que se apoya en ellos mismos para proyectarse mucho más adelante. Que medites esta posibilidad y la hagas una realidad en tu vida. P. Natalio.

jueves, 30 de julio de 2015


Confío y no temo


Buenos días, amigo/a

“Descarguen en el Señor todas sus inquietudes, ya que él se ocupa de ustedes”. Si lees y meditas la Biblia, encontrarás esta exhortación y otras semejantes. Te ayudarán a fortalecer tu confianza en Dios que te ofrece refugio “a la sombra de sus alas mientras vienen calamidades” de cualquier clase y magnitud. “No temas, contigo estoy. Yo te amo”,  te asegura Dios.

Ya no temo, Señor, la tristeza, ya no temo, Señor, la soledad;
porque eres, Señor, mi alegría tengo siempre tu amistad.
 
Ya no temo, Señor, a la noche, ya no temo, Señor, la oscuridad;
porque brilla tu luz en las sombras ya no hay noche, tú eres luz.
 
Ya no temo, Señor, los abismos, ya no temo, Señor, la inmensidad;
porque eres, Señor, el camino y la vida, la verdad. 

Está alerta porque vendrán tentaciones de cobardía, desanimación y desesperanza. El enemigo entrará en tu imaginación para levantar en el aire castillos de dificultades insuperables. Déjale a Jesús el cuidado de todas tus cosas y verás que todo te irá mejor. Abandónate en él y todo se resolverá con tranquilidad según sus designios. La confianza en el Señor es la clave. P. Natalio.

miércoles, 29 de julio de 2015


Verdadera superación


Buenos días, amigo/a

“El hombre moderno está orgulloso del progreso, del avance de la ciencia y la tecnología, vive devorado por esta fiebre, del vértigo del “adelanto”, pero ¿va a alguna parte? ¿Es exagerado decir que el hombre de hoy ya no sabe a dónde va ni para qué vive? Vive “nadando” entre el placer y la comodidad... pero insatisfecho: no experimenta la alegría de vivir”.

Tenemos edificios más altos, pero templos más pequeños; autopistas más anchas, pero puntos de vista más estrechos; gastamos más dinero, y tenemos cada vez menos; compramos más, y disfrutamos menos. Tenemos casas más grandes, y familias más pequeñas; más instrucción, y menos sentido de la vida; más conocimiento, y menos juicio; más expertos, y menos soluciones; más medicinas, y menos bienestar. Tomamos mucho, fumamos mucho, gastamos sin medida, reímos muy poco, nos acostamos muy tarde, nos levantamos muy cansados, casi no leemos, vemos demasiada TV, y casi nunca rezamos. Hemos multiplicado muestras posesiones, pero reducido nuestros valores.

La verdadera superación es dejar atrás algo a lo cual estuviste apegado y de lo cual te cuesta desprenderte; es atreverte una vez más a ser diferente de lo que fuiste ayer; es desarrollarte y evolucionar desde adentro. Cuando decides cambiar una actitud negativa, estás superándote. El gran cambio social comienza en tu corazón. El Señor te inspire y asista. P. Natalio. 

martes, 28 de julio de 2015


Los ciegos y el elefante


Buenos días, amigo/a

Isaac Newton, calificado como el científico más grande de todos los tiempos, y su obra como la culminación de la Revolución Científica, afirmó: “Lo que sabemos es una gota de agua; lo que ignoramos es el océano”. Otro sabio muy estudioso, después de haber vivido 80 años, dejó esta inscripción en su tumba: “He aprendido al menos a no ignorar mi propia ignorancia”.

En cierta ocasión un príncipe oriental, quiso dar una lección inolvidable a sus súbditos. Presentó ante la multitud reunida un enorme elefante. Aparecieron luego unos ciegos que, sin conocer la presencia del animal, fueron conducidos a tocarlo en diversas partes del cuerpo. Luego el príncipe preguntó a cada uno qué había palpado. El que había tocado las piernas dijo que era el tronco arrugado de un árbol. El que había tocado la trompa, una gruesa rama nudosa. El que había tocado la cola, una serpiente desconocida. Y así por el estilo. Se pusieron a discutir entre sí, pero el monarca los interrumpió, diciendo: Lo sucedido aquí les hace ver que de las grandes cosas conocemos muy poco y erróneamente, y de Dios…  casi nada.

Dios es infinitamente más grande que la creación que sacó de la nada. Para conocer algo, la mente sube a él observando el mundo sensible que nos rodea. Poco a poco descubrimos sus perfecciones: es eterno, inmutable, santo, bondadoso, sapientísimo, grande y poderoso, autor de maravillas… Los místicos llegan a él por el amor. Pero es inagotable. P. Natalio.

domingo, 26 de julio de 2015


Después de la vida


Buenos días, amigo

Una vez un taxista me interrumpió una reflexión sobre la vida que sigue a esta vida terrenal, diciéndome: “¡Nadie ha venido a contarnos lo que hay después!”. “Mire, le dije, en la vida de san Juan Bosco hay un hecho que fue presenciado por un grupo de seminaristas entre los 20 y 30 años y que ha testificado este santo (1815-1888) en sus memorias”.

Siendo Don Bosco seminarista hizo un trato con su amigo Luis Comollo: “el que muera primero vendrá a avisar si está o no en el Cielo”. Al poco tiempo murió el amigo de Don Bosco. Habían pasado cuatro días del entierro, y Bosco no podía dormir. Cuando el reloj de la iglesia tocó las doce, se oyó un rumor sordo que hizo vibrar las paredes, el pavimento y el techo.
Los seminaristas se despertaron y quedaron mudos. “Yo estaba petrificado de horror cuenta Don Bosco  se abrió violentamente la puerta del dormitorio; solo se vio un fulgor pálido. Luego un repentino silencio; la luz brilló más y oí la voz de Comollo, que por tres veces me dijo: “¡Bosco, Bosco, Bosco! ¡Me he salvado!”.

Morir en pecado mortal sin estar arrepentido ni acoger el amor misericordioso de Dios, significa permanecer separados de Él para siempre por nuestra propia y libre elección. Eso es el infierno: algo peor que el fuego y cualquier tormento, la separación de un Dios todo bondad, belleza y verdad. Jesús habló quince veces del infierno para que estemos muy atentos. P. Natalio.

viernes, 24 de julio de 2015


Nunca en estado vegetativo


Buenos días, amigo/a

Quizá, como tantos, vives una vida agitada por el ritmo moderno de la vida. No estás habituado a detenerte para encontrarte contigo mismo. Tal vez rehuyes sin advertirlo esos momentos de soledad tan necesarios, mientras abres una y otra vez Internet para distraerte o bien te quedas en el bar con los amigos. Ese vivir como extraños a uno mismo es “alienación”.

Anoche mi mamá y yo estábamos sentados en la sala hablando de tantas cosas de la vida, entre otras, tocamos el tema de cómo vivir y especialmente cómo morir. A cierto punto le dije terminantemente: Mamá, nunca me dejes vivir en estado vegetativo, dependiendo de máquinas y líquidos de una botella. Si me ves en ese estado, desenchufa los artefactos que me mantengan así. ¡Prefiero morir! Entonces, mi madre se levantó con cara de admiración... ¡¡¡Y me desenchufó el televisor, el DVD, el Cable, Internet, la PC, el mp3, el mp4, la Play Station, el teléfono, me quitó el celular, la notebook y me tiró todas las cervezas !!!

El conocimiento de ti mismo, de tus fortalezas y debilidades, está en la base de tu crecimiento armónico como persona. Con un ojo en tus virtudes para conservarlas y darles brillo, y con el otro ojo en tus debilidades para neutralizarlas, afronta con esperanza y firmeza esa labor cotidiana de llegar a realizar el proyecto de Dios sobre tu vida. P. Natalio.

jueves, 23 de julio de 2015


Encuentro importante


Buenos días, amigo/a

Hay decisiones importantes en la vida. Entre ellas está la de reservar un tiempo sagrado cada día para tu encuentro con el Señor. Es importante porque crea una relación afectuosa, verdadera y concreta con Dios, te enriquece de seguridad y felicidad, te ayuda a ejercitar y crecer en la fe y aprendes a enfrentarte con tus errores, egoísmos y fragilidades.

“¡Queridos hijos! Los invito a la oración para que en la oración, ustedes tengan un encuentro con Dios. Dios se ofrece y se da a ustedes. Pero él desea de ustedes que respondan con libertad a su llamado. Por eso, hijitos, encuentren durante el día un tiempo para poder orar en paz y con humildad y encontrarse con Dios el Creador. Yo estoy con ustedes e intercedo por ustedes ante Dios. Por tanto, estén atentos, a fin de que cada encuentro en la oración sea un encuentro gozoso con Dios. Gracias por haber respondido a mi llamado! ” (Reina de la Paz).

“Si adquieres el hábito de orar con sinceridad, tu vida cambiará notable y profundamente. La oración marcará con su influencia tus acciones y conductas. Una tranquilidad de modales, una relajación del cuerpo y del semblante se observará en ti. En tu interior comenzará a brillar una luz”. (A. Carrel). Sé fiel cada día al encuentro gozoso con el Señor que te ama. P. Natalio.

miércoles, 22 de julio de 2015


Los pajaritos y la luciérnaga



Buenos días, amigo/a

No nos contentemos con las luces pequeñas y que no son sino reflejo de la luz increada, origen de todas las luces. No tengamos miedo y familiaricémonos con las fuentes. Leamos los grandes autores y, especialmente, el gran libro donde el mismo Dios nos habla, la Biblia.

Cuatro pajaritos recién emancipados del nido dormían en un monte muy tupido, con la madre. A las doce de la noche fueron despertados por una luz y rompieron a gorjear. La madre, sobresaltada, preguntó lo que les pasaba y contestaron en coro que ya había salido el sol. Y la madre les hizo ver que no era más que una pequeña luciérnaga. A muchos les pasa lo mismo, que ven genios en todas partes y gritan: «¡Aquí está el sol!», al prenderse cualquier vela.(Daireaux).

No leas la Biblia como si leyeras un libro más. Empieza con la invocación del Espíritu Santo, para que su don de sabiduría disponga tu mente a recibir el mensaje que Dios ha preparado con amor especial para ti ese día. La presencia de Dios en su Palabra es una realidad que hay que captar en la fe. Que el Espíritu te guíe e ilumine. P. Natalio.

martes, 21 de julio de 2015


Una sonrisa


Buenos días, amigo/a

¿Qué puedes hacer para mantener el nivel de tu alegría? Empieza por pedirla: “Derrama, Señor, sobre mí tu Espíritu para que me sienta inundado de gozo y alegría espiritual”. Luego defiéndela: vigila para que la tristeza no se infiltre poco a poco en tu corazón. Además, cultívala: por ejemplo, llevando alegría a los otros, contándoles una anécdota graciosa, etc. Leer un texto motivador, como el que sigue,  puede también ayudarte mucho.

La sonrisa es contagiosa; se te pega como la gripe. Hoy alguien me sonrió y yo comencé a sonreír también. Crucé la esquina y alguien me vio sonriendo. Cuando él me sonrió me di cuenta que se la había comunicado yo a él. Pensé sobre esa sonrisa y descubrí su gran valor.
Una sola sonrisa como la que tuve podría viajar alrededor del mundo. Así que si sientes a una sonrisa deslizarse por tu cara, no la dejes sin hacerla detectar de alguien más. Rápidamente iniciemos esta epidemia e infectemos al mundo. Comuniquemos esta sonrisa, sonriamos a un amigo. ¡Todos necesitamos una sonrisa!

Defiende y cultiva la alegría. El sentido del humor te ayudará a encarar las situaciones estresantes de la vida. Ríe, y tus cargas serán aliviadas. Ríe, y tu vida se alargará. Ríe cuando más lo necesites. Si eres capaz de reírte de una situación, por más dolorosa que sea, podrás superarla. Que sepas fomentar hoy tu capacidad de alegría. P. Natalio.

lunes, 20 de julio de 2015


Mi paz y mi consuelo


Buenos días, amigo/a

A veces mendigamos de las creaturas un consuelo y paz que no nos pueden dar. Y por eso perdura el malhumor, la inseguridad, la angustia por el futuro… Es bueno que tengas un tiempo al fin del día, para sosegarte y dejar en manos del Señor penas y preocupaciones, porque está dispuesto a tomar el cuidado de todas tus cosas con infinito amor. Este himno te ambientará.

Señor, tú eres mi paz y mi consuelo al acabar el día su jornada,
y, libres ya mis manos del trabajo, a hacerte ofrenda del trabajo vengo.
 
Señor, tú eres mi paz y mi consuelo cuando las luces de este día acaban,
y, ante las sombras de la noche oscura, mirarte a ti, mi luz, mirarte puedo.

Señor, tú eres mi paz y mi consuelo, muy dentro de mi alma tu esperanza
sostenga mi vivir de cada día, mi lucha por el bien que tanto espero.

Aquí te recuerdo un texto precioso de san Pablo: "Bendito sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de las misericordias y Dios de todo consuelo, que nos reconforta en todas nuestras tribulaciones para que nosotros podamos dar a los que sufren el mismo consuelo que recibimos de Dios", (2 Corintios 1, 3-4). El Señor te bendiga y proteja. P. Natalio.

sábado, 18 de julio de 2015

Naranjas en el océano


Buenos días, amigo/a

Es muy oportuno para crecer en la fe practicar la oración de petición. Por ella permites a Dios entrar en la trama concreta de tu vida. Sientes así la presencia y cercanía del Señor en tus problemas cotidianos. A él no le molesta estar presente en los mínimos detalles de tu existencia, porque te ama. Es también un camino de sólida y auténtica humildad y sencillez.

En un viaje por el océano, una señora se puso tan enferma por el mareo que el médico le dijo que solo comiendo naranjas podría restablecerse. La señora, en su debilidad dijo: Doctor no se preocupe. Mi padre celestial me las enviará. Yo voy a pedírselo ahora. Pero, querida señora contestó él no olvide que nos encontramos en medio del océano. No importa, amigo mío; para Dios todo es posible. Unas horas más tarde, el mismo doctor entraba corriendo hasta la enferma, para poner a los pies de su cama un cesto colmado de naranjas. Como pudo, nervioso y maravillado, explicó su procedencia. Un buque averiado… Un cargamento de naranjas en el buque…Un… ¡Un milagro de mi Padre celestial, doctor! le interrumpió la enferma.

Rezar por cualquier necesidad grande o pequeña, espiritual o material te ofrece la ocasión de verificar la proximidad de Dios. Él quiere librarte de tus angustias y afanes y se pone a tu alcance para cualquier necesidad. De este modo entrarás en una relación afectuosa, verdadera y concreta con Dios. P. Natalio.

viernes, 17 de julio de 2015


Para cambiar actitudes


Buenos días, amigo/a

Con frecuencia Dios, por sus profetas, invitó a Israel a revisar su estilo de vida para hacer los necesarios reajustes que exigía la alianza solemnemente pactada. La Palabra de Dios sigue invitándonos a cambiar para bien, y nos motiva con sabiduría a dar pasos de crecimiento espiritual. Aquí tienes una oración para cambiar actitudes que dañan tus relaciones personales.

Señor, a veces lo que me trae problemas, son mis defectos o mi forma de actuar. Quizás no quiero reconocer esos defectos, y me los oculto a mí mismo. Mis actitudes, mis palabras o mis miradas despiertan el rencor de los demás, la envidia o el desprecio. Señor, ayúdame a descubrir mis actitudes de orgullo, egoísmo o indiferencia, ayúdame a ver todo eso que cae mal a los ojos de los demás. Y dame tu ayuda divina para que pueda cambiar. Porque si mis actitudes son más agradables y sinceras, las malas miradas de los demás se disiparán como el vapor. Tócame con tu gracia, y embelléceme con virtudes y dones que me hagan más agradable a los ojos de los hermanos. Quiero ser un instrumento tuyo para bendecirlos y hacerles bien. Tómame, Señor. Amén. (P. Víctor Fernández).

La comunicación te abre a las riquezas de las personas, mientras dejas que también ellos se enriquezcan con tus propios dones. Sin la comunicación, que es abrirse a los demás y aceptarnos mutuamente, no puede haber verdadero amor. Encerrarse en uno mismo es muerte, en cambio abrirse como hermano es vida, libertad y madurez. P. Natalio.

jueves, 16 de julio de 2015


Invitados al casamiento…


Buenos días, amigo/a

La sinceridad es una virtud exigente, ya que puedes faltar a la verdad de distintas y sutiles maneras. Por ejemplo, con la simulación, que es mentir con los hechos, o con la hipocresía pasando por lo que no se es, o con jactancias atribuyéndose uno excelencias que no posee, o con adulaciones cuando se engaña para sacar algún provecho de los otros. Un ejemplo.

En todas las fiestas siempre hay alguno colado. Esto sucede en cualquier lugar. Una vez en una familia se organizó una fiesta muy importante. El dueño de casa empezó a sospechar porque había muchos más de los calculados.
Entonces hizo parar la orquesta y dijo: —¡Por favor la orquesta interrumpa un momentito! A ver, los invitados del novio pasen de este lado; y los invitados de la novia de este otro lado… Enseguida gran parte de la concurrencia se dividió en dos bandos.
—Bueno —dijo el dueño—, ¡ahora mismo se van todos ustedes inmediatamente, porque esto es un bautismo!

Es lamentable que en Argentina estas faltas de sinceridad sean celebradas como “viveza criolla”, feo vicio antisocial que ha vulnerado tristemente nuestra imagen en el exterior. Y lo peor es que perdura entre nosotros cuando aplaudimos al canchero, al piola, al madrugador, que son los “avivatos” y “ventajitas” de las historietas cómicas. La verdad nos hará libres. P. Natalio.

miércoles, 15 de julio de 2015


Confiar en el Señor


Buenos días, amigo/a

Si te habitúas a dejar en las manos del Señor todas tus cosas, todo empezará a mejorar y se resolverá con facilidad según sus designios. Él espera que te abandones confiadamente en sus manos, para guiarte por senderos de paz en medio de los problemas cotidianos. Los santos nos han dejado ejemplo de esta absoluta confianza en el Señor y de una gran serenidad.

“¿Por qué te confundes y te agitas ante los problemas de la vida? Déjame el cuidado de todas tus cosas y todo te irá mejor. Cuando te abandones en mí, todo se resolverá con tranquilidad según mis designios. Abandónate confiadamente en mí. Reposa en mí y deja en mis manos tu futuro. Dime frecuentemente: “Jesús, yo confío en ti”. Déjate llevar en mis brazos divinos, no tengas miedo. Yo te amo. Si crees que las cosas empeoran o se complican a pesar de tu oración, sigue confiando. Cierra los ojos del alma y confía. Continúa diciéndome a toda hora: “Jesús, yo confío en ti”. Y verás grandes milagros. Te lo prometo por mi amor”. Jesús.

Quien vive abandonado en el Señor crece en una relación verdaderamente filial con el Padre; está disponible a lo que se presente; su corazón se vuelve simple y libre; tiene facilidad para vivir con humildad los misterios de la vida; y se libera de toda ansiedad por el porvenir incierto: “Será lo que el Padre quiera”, dice con total sumisión. Deja al Señor dirigir tus pasos. P. Natalio.

martes, 14 de julio de 2015


Una pintura de Rafael


Buenos días, amigo/a

Hay un refrán que dice: “La palabras mueven, los ejemplos arrastran”. Estos dichos populares son expresión de esa sabiduría que tiene el aval de la experiencia cotidiana. Son irrefutables. Y es la pura verdad que más que las palabras lo que mueve y conmueve a grandes y pequeños son los ejemplos que vemos. Y tanto para el mal como para el bien.

Un joven artista intentaba copiar a la perfección una de las más hermosas pinturas del mundo, hecha por Rafael. Había viajado a Florencia a estudiarla, y luego se dedicó a reproducir esta obra maestra. Al terminar, el artista admitió que había realizado un cuadro hermoso, pero que no podía compararse con la excelencia del original. “¡Ah, si pudiera posesionarme del espíritu de Rafael!”, exclamó el joven, “solo entonces podría pintar como el gran maestro.”

Cristo Jesús, con sus palabras y, sobre todo con su ejemplo nos anima a superarnos y avanzar de virtud en virtud a la perfección de la vida cristiana. Pero Jesús se dejó mover y arrastrar por el Divino Espíritu. Ora con frecuencia pidiendo al Señor que te llene de los dones del Espíritu Santo, para asemejarte cada vez a la belleza y santidad de Jesús, el divino modelo. P. Natalio.

lunes, 13 de julio de 2015


“Desbordo de gozo”


Buenos días, amigo/a

Hoy te presento un alegre mensaje de la Reina de la Paz con estas palabras de Isaías (61, 10): “Desbordo de gozo en el Señor y me alegro con mi Dios, porque me ha vestido un traje de gala  y me ha envuelto en un manto de triunfo”. Ese vestido de gala es la santidad y justicia de la vida nueva de la gracia, que nos ha conquistado Cristo Jesús, nuestro Salvador.

 “¡Queridos hijos! Hoy los invito a todos a regocijarse continuamente por la vida que Dios les concede. Mis queridos hijos, regocíjense en Dios el Creador, porque él los ha creado de manera tan maravillosa. Oren para que sus vidas estén llenas de una gozosa acción de gracias que brote desde su corazón, como un río de alegría. Mis queridos hijos, den incesantemente gracias a Dios por todo lo que poseen, por cada pequeño don que Dios les ha concedido. De esa forma, la bendición gozosa de Dios descenderá siempre sobre sus vidas. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”.

“Vivir dando gracias a Dios” (san Pablo), te ayudará a relacionarte con él de una forma muy concreta, descubriendo los dones que te regala a cada paso. Por otra parte es una oración que te ensanchará el corazón y descansará tu mente. Si tienes alguna dificultad, ¿por qué no ensayas escribir brevemente los motivos de tu gratitud? El Señor te fortalezca. P. Natalio.

sábado, 11 de julio de 2015


La vendedora de flores


Buenos días, amigo/a

Cuando tu vida se encrespa con alguna tormenta, no pierdas el ánimo, porque hay dentro de ti fuerzas insospechadas. No olvides que nada puede acontecer antes que se ponga el sol que no parezca insignificante en el río de los siglos. Mantente sereno e imperturbable diciéndote una y otra vez: “También esto pasará”. Aquí tienes un testimonio que lo confirma.

Ese día la vendedora de flores sonreía más que lo habitual; su arrugado rostro resplandecía de gozo. Por un impulso le compré una de sus rosas. — Se ve usted muy feliz está mañana, le dije. — ¡Claro!, exclamó. Sobran los motivos. Aquella mujer vestía tan pobremente y se veía tan frágil, que su actitud me intrigó. — Sobrelleva sus problemas admirablemente, la elogié. Ella me explicó entonces: — Cuando crucificaron a Cristo, el Viernes Santo, fue el día más triste de la historia. Pero tres días después, él resucitó. Por eso he aprendido a esperar tres días siempre que algo me aflige. Es asombroso: las cosas siempre se arreglan de una u otra manera en ese tiempo. Seguía sonriendo al despedirse de mí. Sus palabras me vienen a la mente siempre que estoy en dificultades.

Repite las tres sabias palabras que nos han transmitido los antiguos, hasta que se conviertan en un hábito tan fuerte que al punto aparezcan en tu mente cuando el buen humor esté por apartarse de ti. Ellas mantendrán tu vida en equilibrio y triunfarás en medio de las adversidades: “También esto pasará”, (Og Mandino). Haz la prueba. P. Natalio.

viernes, 10 de julio de 2015


Señor, cómo quisiera…


Buenos días, amigo/a

Te invito a gustar un himno y perfumar tu oración de esta mañana con sus delicados versos que rezuman nostalgia de Dios y deseo de amarlo más a él y a los hermanos. Es agradable la musicalidad de sus rimas que evocan arpegios de arpas y cítaras.

Señor, cómo quisiera en cada aurora aprisionar el día,
y ser tu primavera en gracia y alegría, y crecer en tu amor más todavía.
 
Ya despierta la vida con su canción de ruidos inhumanos;
y tu amor me convida a levantar mis manos y a acariciarte en todos mis hermanos.
 
Hoy elevo mi canto con toda la ternura de mi boca,
al que es tres veces santo, a ti que eres mi Roca en quien mi vida toda desemboca.

Cuantas más veces releas en actitud de oración esta y semejantes composiciones poéticas, más descubrirás la riqueza de su denso contenido y el fervor de su emoción religiosa. Es una buena ayuda para tu encuentro personal con el Señor. Pienso que podrá serte útil. P. Natalio.

jueves, 9 de julio de 2015


El dolor y el placer


Buenos días, amigo/a

Cuando se recuperaba de una operación en la pierna, destrozada por una bala de cañón, San Ignacio tuvo una experiencia que lo marcó en la vida. Advirtió que el placer que le producía leer vidas de santos era bien distinto del experimentado después de disfrutar una novela de caballería. Era un placer espiritual, muy delicado, que le dejaba una alegría pura y duradera.

El dolor y el placer sirven para apreciar la diferencia entre la vida material y la espiritual. Comes una golosina que te gusta mucho. Es un placer material. A los po­cos minutos se acaba el goce. Tienes una moneda. Encuentras a un niño muy necesitado que sufre hambre. Le das tu moneda. Todo ese día recor­darás tu buena acción. Un año después, veinte años después, recordarás que un  día te privaste de tu monedita para que un niño comprara pan. Este placer es espiritual; es puro y duradero. Si al cerrar una puerta te aprietas un dedo experimentarás dolor. Pero pasa este dolor y al día siguiente ya no lo re­cuerdas. Era un dolor material. Le das un gran disgusto a tu madre, robas algo, cometes una injusticia con un compañero. La conciencia te dice que has procedido mal. Te duele haber pro­cedido así. Este dolor dura mucho. Este dolor es espiritual.

Dios, dice San Agustín, mezcla las amarguras con las alegrías de la tierra, a fin de llevar al hombre a aquella felicidad y alegría, cuya dulzura nunca engaña y que sólo se encuentra en Dios. El mundo se regocija en la nada: sus alegrías están vacías, no tienen sabor ni duración. Son una gota de miel que se convierte en un mar de hiel. Ojalá captes la diferencia. P. Natalio.

miércoles, 8 de julio de 2015

Las dos alforjas


Buenos días, amigo/a

Jesús dijo “No juzguen y no serán juzgados”, y también “Felices los misericordiosos porque obtendrán misericordia”. El que critica es porque antes ha juzgado al prójimo. No juzgues porque no conoces la situación real de cada uno. Eso sólo lo sabe Dios. Júzgate en cambio a ti mismo: es lo más acertado, es el tiempo mejor empleado.

Cuenta una fábula que Zeus colocó dos alforjas a cada ser humano: una delante, sobre el pecho y otra atrás a la espalda. Los hombres, imprudentemente, todos han puesto en la alforja que está a la vista los defectos de las personas que van conociendo, mientras que los defectos propios en la alforja que tienen en la espalda. Por eso conocen tan bien y tienen siempre presente los defectos ajenos, pero conocen poco y se olvidan de los defectos propios.

El conocimiento de uno mismo es llave de sabiduría, porque desde tu realidad personal puedes crecer y superarte. Epitecto, filósofo griego, escribió que “La cosa más difícil es conocernos a nosotros mismos, la cosa más fácil, hablar mal de los demás”. Conocerte es encontrarte con tus límites y fragilidades, y también con tus logros y fortalezas. Ten un tiempo para evaluarte. P. Natalio.

martes, 7 de julio de 2015


Para protegerte de la envidia


Buenos días, amigo/a

El P. Alfonso Milagro, autor de libros muy vendidos, cuenta esta constatación: Encontré a un hombre de buenas cualidades que casi las maldecía. Le pregunté por qué y me respondió: “Porque hacen sombra, y eso no me lo perdonan”. Eso es la envidia, un sentimiento de aguda incomodidad al ver a otro que tiene lo que deseamos. ¿Cómo protegerte? Con esta oración:

Protégeme, Señor, de todo mal, cúbreme con tu preciosa sangre salvadora, rodéame con la gloria de tu resurrección. Cuídame por la intercesión de María, de todos tus santos y de todos tus ángeles. Cúbreme con tu gloria, Dios mío. Mira a los que quieren dañarme o desprestigiarme. Muéstrales la fealdad de la envidia, y toca sus corazones para que me miren con buenos ojos. Sánalos de todo mal sentimiento, cura sus heridas más profundas, y bendícelos en abundancia, para que sean felices, y ya no necesiten dañarme. Confío en ti, Señor. Amén. (P. Víctor Fernández).

El envidioso no cae en la cuenta de que la infelicidad no proviene de lo que no se tiene, sino de la falta de aprecio por lo que sí se posee. Hay además una falta de compromiso y responsabilidad con la propia vida, porque el celoso, pendiente de la vida de otros, no asume la propia con sus fortalezas y posibilidades reales. El Señor te libre de todo daño. P. Natalio.

lunes, 6 de julio de 2015


Cocodrilo


Buenos días, amigo/a

Michel Quoist en “Triunfo” afirma: «Hay quienes “no tienen los pies sobre la tierra”, sencillamente vuelan. Vuelas, cuando consideras tus sueños como realidad; cuando pasas el tiempo concibiendo planes que jamás realizas; cuando no te adaptas a las personas y a las cosas. Soñar tu vida no es vivirla».  Aquí tienes un cuento de uno que vive en sus fantasías.

Estaba un paisano sentado al mostrador del boliche tomando una caña, cuando entró otro paisano y le pidió al patrón que le preparara un sándwich de cocodrilo. El bolichero le dijo que no tenía y el paisano se fue.
Asombrado el que estaba tomando la caña, preguntó al patrón:
—Perdone, ¿escuché mal o ese paisano está loco?
—Y claro que está loco –contestó el bolichero–. ¡Mire si voy a empezar un cocodrilo solamente para él!

Un signo de madurez es aceptar la realidad y poseer suficiente solidez y equilibrio para vivirla. La persona madura es objetiva: sabe valorarse a sí mismo sin dejar de valorar a los demás. Es capaz de tomar una decisión y sostenerla. Madurez es el arte de vivir en paz con lo que no se puede cambiar. Ejercítate en la sabiduría de “poner siempre los pies sobre la tierra”. P. Natalio.

sábado, 4 de julio de 2015


La chicharra y la rana


Buenos días, amigo/a

La incomprensión entre las personas es una realidad cotidiana. Entre los mismos miembros de la familia, en las asociaciones apostólicas y grupos humanos sucede lo que la Reina de la Paz señaló en un mensaje: “Hijitos, oren y no permitan que Satanás actúe en sus vidas con malentendidos, incomprensiones y faltas de aceptación entre unos y otros”.

Entre las tupidas hojas de un árbol la chicharra chirriaba. De repente se calló, dejando sordos a todos su mismo silencio; y la rana aprovechó la ocasión para contestarle con su potente croar. Oyendo esto, la chicharra volvió a chirriar. La rana, ella, siguió, como si tal cosa, y durante horas, ambas cantaron así juntas, sin hacerse caso una a otra. Hasta que, cansadas de tanto gritar, se callaron, exclamando ambas a la vez, en son de crítica: «¡Qué lata tiene!».(Daireaux).

San Pablo a los colosenses los pone en guardia contra las rivalidades, envidias y discordias, obras propias del hombre carnal y terreno. Desea, por el contrario, verlos llenos de los frutos del Espíritu, a saber: amabilidad, bondad, confianza mutua, alegría, amor y paz. Por lo tanto, vigila y ora al Espíritu Santo para que encienda en tu corazón el fuego de su amor. P. Natalio.

viernes, 3 de julio de 2015


Confiar en el Señor


Buenos días, amigo/a

La Reina de la Paz te invita hoy a abandonarte en el Señor, actitud que te dejará sereno y tranquilo en medio de las tempestades de la vida, porque te has fiado nada menos que de Dios que es poderoso, bondadoso y fiel a su Palabra. Él dijo por boca del salmista: “Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor porque no quedará defraudado”.

“¡Queridos hijos! También hoy los invito a la oración y al abandono total a Dios. Ustedes saben que yo los amo y es por amor que he venido aquí, para mostrarles el camino de la paz y la salvación de sus almas. Yo deseo que ustedes me obedezcan y que no permitan a Satanás que los seduzca. Queridos hijos, Satanás es fuerte y por eso les pido sus oraciones y que me las ofrezcan por aquellos que están bajo su influencia, para que sean salvados. Den testimonio con sus vidas y ofrezcan sus vidas por la salvación del mundo. Yo estoy con ustedes y les doy las gracias. En el Cielo, ustedes recibirán del Padre la recompensa que él les ha prometido. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado! ”

Quien vive abandonado en el Señor crece en una relación verdaderamente filial con Dios, su Padre; está disponible a todo lo que se presente, su corazón se vuelve simple y libre, tiene facilidad para vivir con humildad de corazón los misterios de la vida, se libera de toda ansiedad por el porvenir incierto: “Será lo que el Padre quiera”, dice con total sumisión. P. Natalio.

jueves, 2 de julio de 2015


Cómo ganar amigos


Buenos días, amigo/a

Respetar las opiniones del otro es una de las mayores virtudes que un ser humano puede tener. Las personas son diferentes, por lo tanto piensan y actúan de modo diferente. No juzgues, tan sólo comprende. Alguien escribió con acierto: "Comprender es una palabra viva y la carne de esa palabra es amor”. 

El presidente de los EE.UU, Abraham Lincoln, era famoso por la extrema cortesía que dispensaba a sus adversarios políticos. La conducta del presidente no siempre era compartida por sus propios ministros. Uno de ellos, un día, le dijo fastidiado: ¿Por qué los tratas como si fueran tus amigos? ¡Merecerían más bien que los eliminaras! "Es lo que hago" respondió Lincoln. "¿Acaso no elimino a un enemigo cada vez que lo convierto en amigo?”

“Urbanidad y buenos modales abren puertas principales”, dice un refrán español. La convivencia humana se hace más fácil y agradable si, además de la sinceridad y sencillez del trato, procuramos no molestar con modales o expresiones que hieren la sensibilidad de los demás. Una persona afable, serena, respetuosa es bien recibida por todos. P. Natalio.

miércoles, 1 de julio de 2015


El deber, clave de felicidad


Buenos días, amigo/a

Las obligaciones asumidas constituyen lo que Dios espera de ti, porque son la expresión concreta de su voluntad. Son esas exigencias de la vida familiar, de tu trabajo o profesión, de las relaciones humanas que te envuelven. La paz y la felicidad no surgen de algunas grandes y espectaculares actuaciones, sino del cumplimiento de los deberes de cada día.

Hay un momento admirable en la vida del hombre: es cuando tomas ante tu propia conciencia el compromiso de cumplir cada día tu deber. De allí en adelante, comienzas a mirar todo desde otro punto de vista, y cada cosa cobra nueva perspectiva y nuevo valor. De allí en adelante, te abres a una nueva etapa, más hermosa y sublime, porque en tu vida ha entrado a ocupar un lugar decisivo, el deber en vez del dinero, del placer, del confort, del egoísmo indiferente. Y si el deber ocupa el primer lugar, también lo ocupa Dios, y si Dios está primero, todo está en orden. Así puedes gozar de la verdadera paz. La fidelidad al deber, a las exigencias de tus relaciones personales es fidelidad al amor, y el único acceso a la auténtica felicidad.

Tu vida, como la de todos, transcurre entre sencillas tareas. Puedes caer en el grave error de juzgarlas sin importancia y hacerlas sin implicarte con entusiasmo y amor poniendo lo mejor de ti mismo. No olvides que “no hay virtud más eminente que la de hacer sencillamente lo que tenemos que hacer”. Que descubras y vivas la felicidad y paz del deber cumplido. P. Natalio.