martes, 18 de enero de 2011

Arquías, tirano de Tebas


Buenos días, amigo/a.

Uno de los defectos más comunes de la naturaleza humana es retardar lo
que deberíamos y podríamos hacer ahora. Cuántas hermosas iniciativas
han muerto por esta concesión a la pereza que nos lleva a dejar para
después lo que podemos hacer hoy mismo. Aquí tienes una anécdota que
ilustra, quizá demasiado trágicamente, el precio de diferir las
decisiones.

Cuando los espartanos tomaron a Tebas, le impusieron por gobernador a
Arquías, tirano que se hizo odioso por sus crueldades. Un día mientras
celebraba un festín con sus amigos, un mensajero le trajo una carta y
le pidió que la leyera enseguida. El tirano exclamó con decisión:
“Dejemos para mañana los asuntos serios y sigamos la fiesta”. En la
carta se le avisaba de una conjuración que lo sorprendería al final
del banquete. En efecto poco después entró Pelópidas con sus adictos y
puso fin a la vida de Arquías.

Hemos iniciado un nuevo año, recuerda: “Tus sueños carecen de valor,
si no pones de tu parte decisión y acción. Solamente la acción es la
chispa que enciende tus sueños, planes y metas hasta convertirlos en
realidad. No te demores, no postergues. El secreto de los corazones
valientes es proceder ahora mismo y hacer frente al desafío del
momento”, (O M). P. Natalio.

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