Mensaje mariano
Buenos días, amigo/a.
El egoísmo atrofia al hombre, que sólo en la donación generosa a los
demás.encuentra su plenitud. Si te preocupas demasiado por ti mismo y
tus cosas, si vives para acumular dinero y comodidades, no te quedará
tiempo para los demás. Si no vives para los demás, la vida carecerá de
sentido para ti, porque la vida sin amor no vale nada.
Mis amados: volved vuestros ojos al espíritu. Desatad vuestros
egoísmos y veréis claro. Si el hombre de hoy se acercase más Dios, si
observase los Mandamientos, si viviese en un santo Temor, muchos
problemas que hoy os aturden no existirían. Mas, perdéis días, horas,
semanas en preocupaciones vanas e inútiles. ¿Y si viniese el dueño de
la boda y no os encontrara con la lámpara encendida? ¿Qué respuesta le
daríais? Mis pequeños, sabed ser pequeños, grandes en Humildad y
Pureza. Recordad que esta Madre os ama y sabe lo que es lo bueno para
vosotros.
Dios espera la colaboración del hombre para su plan de amor. El mal ha
entrado en el mundo por la puerta del egoísmo humano, que es negación
del amor. “Este es mi mandamiento, —dijo Jesús— que se amen los unos a
los otros como yo los he amado”. El Padre bondadoso derrame sobre ti
el Espíritu del amor, que es el Espíritu de Jesús. P. Natalio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario